Corfo y Minera Candelaria apuestan por el desarrollo de proveedores locales

Cien empresas de Tierra Amarilla, Copiapó y Caldera participarán de esta iniciativa que busca mejorar su productividad y aumentar sus estándares de seguridad

 

En el marco de una alianza estratégica entre Corfo, Minera Candelaria y CORPROA, se realizó la ceremonia y la firma de contrato de inicio del Programa de Desarrollo de Proveedores (PDP) Mejorando la Competitividad de Proveedores Locales de la Industria Minera, el cual busca contribuir al mejoramiento de los niveles de seguridad y productividad de las empresas colaboradoras de Minera Candelaria y emprendedores regionales, ubicados en las comunas de Tierra Amarilla, Copiapó y Caldera.

En este contexto, el Intendente de la Región de Atacama, Miguel Vargas, presente en la actividad, destacó la relevancia de estas iniciativas para el desarrollo del empleo regional. “Siempre hemos dicho que en la tarea de generar más puestos de trabajo y mejorar la calidad de vida de los personas de Atacama todos tenemos un rol muy importante que jugar y eso significa trabajar en conjunto”.

La máxima autoridad regional también destacó la oportunidad que este programa ofrece para que las empresas de mayor tamaño puedan capacitar a sus proveedores y agregó “agradecemos el compromiso de Compañía Minera Candelaria, que se caracteriza por contratar a trabajadores que residen en la región y, junto con ello, a un buen número de proveedores locales”.

Por su parte, el director regional de Corfo, Alejandro Escudero, señaló que “con esta estrategia pública y privada estamos generando alianzas virtuosas que permitan instalar a Atacama como una región líder en productividad minera.

Para eso el Gobierno se ha propuesto en conjunto con los empresarios y Minera Candelaria echar a andar este proyecto que permitirá a cien proveedores mejorar sus capacidades, identificar sus brechas y aumentar la competitividad. Todo ello, para que los mandantes, sus proveedores y sus trabajadores puedan contribuir en esta estrategia para que nuestra región se instale como un referente líder en competitividad, productividad, seguridad laboral y sustentabilidad para el desarrollo de la minería”.

“Esta iniciativa es tremendamente importante para nosotros porque abrimos la puerta para proveedores locales y también para el desarrollo de nuevos emprendedores y nuevas empresas de servicios y de insumos que son de gran importancia para incorporarlos en nuestra cadena de abastecimiento, y de este modo contribuir al desarrollo de Copiapó, Tierra Amarilla y Caldera”, destacó el gerente general de Minera Candelaria, Sergio Armstrong.

La continuidad operacional que otorga el proyecto Candelaria 2030, representa una gran oportunidad e impacto para las tres comunas, porque viene asociado a nuevos requerimientos de servicios y productos y desde los rubros más especializados a servicios generales y básicos, requeridos por la faena directamente o demandados a través de contratistas. Algunos de los rubros de las empresas proveedoras son venta y arriendo de insumos de equipos y maquinarias, obras civiles, construcción y movimiento de tierra, servicios de ingeniería y construcción, servicios de alimentación y hospedaje, entre otros.

Historia de un Oso en Copiapó

Con el objetivo de motivar a los participantes del Programa de Desarrollo de Proveedores, y demostrarles que cuando uno se propone hacer realidad un sueño, es factible lograrlo gracias al trabajo, disciplina y esfuerzo, se presentaron los creadores de «Historia de un Oso», Gabriel Osorio y Patricio Escala, quienes obtuvieron un Oscar por este cortometraje animado, posicionándose así en la cima de la industria de la animación mundial.

El cortometraje, producido por Punkrobot Studio, cuenta la historia de un oso que recuerda su vida usando un diorama, donde se ve su tragedia al ser capturado por un circo junto a su familia, trama inspirada en el abuelo exiliado del director, Leopoldo Osorio, quien el año 1973 fue encarcelado por dos años y luego viajó a México y se exilió en Inglaterra.

La creación tomó cuatro años de trabajo y mezcla cuatro técnicas de animación: computarizada, 2D, 3D y stop motion. Tuvo un presupuesto de USD 40 000 y el apoyo de la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), el Fondo Audiovisual de la Cultura y la Universidad de las Américas.

“Para nosotros el mensaje central que queremos transmitir, a través de esta charla, es poder mostrar lo que hacemos en primer lugar, que es la animación y también apoyar la diversificación de los contenidos. Queremos compartir nuestras experiencias para darnos cuenta que desde un país al fin del mundo como Chile, se pueden hacer grandes cosas”, señaló Gabriel Osorio, director del cortometraje.

“Vivimos una experiencia que, esperamos en un futuro quizás poder repetir, pero por ahora queremos compartirla con otros emprendedores. Para nosotros ganar el Oscar significó darnos cuenta que podíamos hacerlo desde Chile con los recursos que teníamos y con nuestras ideas. Queremos incentivar eso en las personas, y que vean y busquen la forma de sacar adelante sus ideas y proyectos independiente de las limitaciones de recursos que puedan existir”, manifestó el productor ejecutivo, Gabriel Escala.

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