Los jugadores de Pizzi nuevamente decepcionaron al cosechar un mezquino empate frente a Bolivia en condición de local. Con esto, quedan fuera de la zona de clasificación para el próximo Mundial.

Durante la previa de esta doble fecha clasificatoria rumbo al Mundial de Rusia 2018, varios de los seleccionados chilenos se preocuparon de instalar el debate sobre si el equipo que dirige Juan Antonio Pizzi está o no dentro de los mejores del mundo, arengando con tintes de soberbia. Pero lo cierto es que la Roja habla más fuera que dentro de la cancha.

Esto quedó nuevamente en evidencia después del empate sin goles con que finalizó el encuentro ante Bolivia, donde el combinado nacional no pudo ratificar su condición de favorito y se mantuvo fuera de la zona de clasificación para la cita planetaria en el gélido país.

Teniendo el estadio Monumental como escenario, el “Equipo de Todos” salió con todo en busca del tempranero desequilibrio. De hecho, en los primeros pasajes de la brega no permitieron que el rival respirara, y sólo las buenas intervenciones del portero Carlos Lampe evitaron la apertura del marcador.

Las ocasiones más claras del primer tiempo fueron cortesía de Eduardo Vargas, quien a los 12 y 13 minutos remató con violentos cabezazos, transformando al golero altiplánico en figura.

Pero con el correr del tiempo, los pupilos de Pizzi perdieron precisión. Eso, sumado a que los forasteros apostaron a dejar que los minutos avanzaran en medio de mediocres actuaciones, transformó el espectáculo en algo digno de bostezos.