OPINIÓN

La terrible vuelta a la era de los Emperadores y de los reyes absolutos  ( Guillermo Cortés Lutz, Doctor en Historia, GEA Atacama )

Pareciera, viendo a algunos modernos gobernantes,  que volvimos a la era oscura de emperadores y  reyes del pasado.    En la  larga historia del mundo, se caracterizaron por ser   ultra autoritarios,  idiotas, seres violentos y crueles; que además muchas veces dejaban a sus válidos, lo que serían sus ministros cometer  fechorías.   En Roma, ya  Tiberio inauguraba la era de las crueldades,   luego  el excéntrico  Calígula, se proclamó dios, de Nerón mejor, ni hablar,  entre las  incorrecciones de esta gente, decir que  mataban, violaban y   se casaban entre ellos.   Que podemos decir de Temujin, Gengis Kan, fanático expansionista y cuya autoridad se basaba en su poderío bélico. A lo menos tenía el recato  de ponerse al frente de su tropas, y no estar escondido en el pentágono.

Ya más modernamente aparecen los reyes  absolutos, con horribles ministros,  un ejemplo del siglo XVII, es   Gaspar de Guzmán, Conde Duque de Olivares,  favorito de Felipe IV de España, ministro arrogante y sin contacto con la realidad, que creía; “ tener una protección tan fuerte”.   Que tiempos oscuros aquellos de nuestra historia mundial.   Luis XIV de Francia el rey sol, su frase arquetípica, “El estado soy yo”, habla de la barbarie e insolencia de algunos gobernantes. Pero, se fue imponiendo la  participación y la democracia, vendrán  la revolución francesa, la revolución mexicana, la revolución rusa,  Chile, tuvo su propia revolución en 1932, liderada por un Copiapino Marmaduke Grove Vallejos,  que buscaba alimentar al pueblo, vestir al pueblo, domiciliar al pueblo. Todas estas luchas van abriendo camino a un mundo más humano y civilizado.

Pero, el mundo recaerá,  vendrán los grandes tiranos; el fascista  Mussolini,   Hitler, Stalin, Franco, pero la democracia se iría imponiendo,   el fin de la segunda guerra mundial deja en algo fortalecidas a las democracias.   Los pueblos evolucionan y buscan desarrollar;  ciencia, y educación, vivienda y trabajo,  salud y derecho a la recreación, tolerancia y miradas de género,  se trata de generar equidades, libertad y justicia.   En otros lados del mundo, India,  se independiza del abusivo gobierno de su majestad inglesa, incluso África vive sus independencias, Nelson Mandela, es el ejemplo del  ser político, un demócrata a profundidad,  que abre una camino para un nuevo mundo. Y por cierto, están   las nefastas dictadura cívico militares  que  devastaron a  América Latina,  donde  no estuvimos  al margen, pero todas van cayendo por el peso  de las violaciones a los derechos humanos y por su propia  corrupción, dejando  paso a la democracia, y a  una  vida más tranquila y con algo   más humanidad.

Pero, hoy mirando la historia del mundo, vemos con cierta angustia la llegada de los nuevos emperadores, reyes y reyezuelos, o si no,  como podríamos definir a   personajes  tan excéntricos como  Trump, Bolsonaro,  Johnson, Kim Jong-un,  Duterte, el siempre presente Vladimir Putin.  Aunque con otro  tono,  y   si fuéramos perspicaces, que no lo somos, si    lo pensamos bien,  la  Canciller Merkel que lleva en el poder  15 años,  religiéndose  por 4 veces seguidas, un presidente latinoamericanos que se religiera por 4 veces , seria tratado  por el  pensamiento eurocentrista y por  nuestra doble moral, como bananero y dictador.    Y luego están los reyes menores,    bufones, codiciosos y muy dados a la corrupción, que han aprovechado el  poder que les ha dado esta  terrible  coyuntura sanitaria del Covid 19.

La historia, no juzga, dijo el historiador   francés Marc  Bloch, pero Clío  la musa de la historia,  vieja y joven  a la vez, a veces les da  a las personas y los pueblos la capacidad para definir y juzgar, y   todo indica que , por su mal desempeño, por poner en riesgos a las personas y al mundo, a estos nuevos emperadores y reyes, ya  se les ha juzgado.

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