Mueren 14 manifestantes a manos de las fuerzas iraquíes
NAJAF, Irak, 28 nov (Reuters) – Las fuerzas de seguridad iraquíes mataron a tiros a 14 manifestantes en la ciudad sureña de Nassiriya el jueves, según dijeron fuentes médicas, mientras las autoridades impusieron un toque de queda en Najaf después de que los manifestantes quemaran un consulado iraní.
Las autoridades crearon “células de crisis” militares y civiles conjuntas para frenar los disturbios.
El incendio del consulado intensificó la violencia en Irak después de semanas de manifestaciones masivas que buscan derrocar a un Gobierno al que los críticos consideran endémicamente corrupto y respaldado por Teherán.
La incapacidad del Gobierno y de la clase política iraquí para hacer frente a los disturbios y responder a las demandas de los manifestantes ha alimentado la ira pública.
Las protestas, que comenzaron en Bagdad el 1 de octubre y se han extendido por las ciudades del sur, son el desafío más complejo al que se enfrenta la clase dominante, de mayoría chií, que ha controlado las instituciones estatales desde la invasión de 2003 dirigida por Estados Unidos que derrocó al gobernante suní Saddam Hussein.
La mayoría de los manifestantes son jóvenes chiíes que dicen que los políticos son corruptos, y que están en deuda con las potencias extranjeras —especialmente con Irán—, y los culpan de la incapacidad del país para recuperarse de años de conflictos bélicos a pesar de la relativa calma desde la derrota del Estado islámico en 2017.
Las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes reunidos en un puente en Nassiriya, antes del amanecer, dijeron fuentes médicas. Catorce personas murieron y decenas más resultaron heridas en el incidente, añadieron.
Se impuso un toque de queda en la ciudad santa de Najaf, al sur del país, donde los manifestantes irrumpieron y prendieron fuego al consulado iraní. Comercios y oficinas gubernamentales echaron el cierre, según informaron medios de comunicación estatales.
Hasta ahora, ha supuesto la expresión más fuerte del sentimiento antiiraní de los manifestantes iraquíes.
“La quema del consulado anoche fue un acto valiente y una reacción del pueblo iraquí, no queremos a los iraníes”, dijo Ali, un manifestante en Najaf.
