
Un grupo de migrantes presuntamente indocumentados que logró cruzar el lunes desde Chile hacia Perú fue devuelto horas después al territorio nacional, luego de que fuerzas policiales peruanas les impidieran avanzar hacia el control fronterizo de Santa Rosa. La situación, registrada por medios locales y posteriormente confirmada por el presidente peruano José Jerí, volvió a tensionar la zona limítrofe en la región de Tacna.
Los migrantes, varios de ellos con niños y cargando numerosas pertenencias, inicialmente sortearon el intento de un reducido grupo de policías de detenerlos en la línea fronteriza. Sin embargo, cuando se dirigían al puesto de control de Santa Rosa con la intención de registrar su ingreso, fueron repelidos por cerca de un centenar de agentes de la Policía Nacional del Perú, lo que obligó a su retorno a pie hacia el lado chileno.
Imágenes difundidas por Canal N mostraron al grupo caminando de vuelta hacia territorio nacional. Minutos más tarde, el propio presidente Jerí confirmó la situación y destacó que, aunque hubo sorpresa inicial, existió una “respuesta inmediata” por parte de las fuerzas de seguridad. El mandatario afirmó que se aplicarán “medidas correctivas” para evitar que episodios similares se repitan.
Jerí reiteró que la declaración de estado de emergencia en la frontera con Chile —vigente desde el viernes— busca reforzar el control mediante el apoyo de las Fuerzas Armadas a la Policía. Subrayó que esta disposición no puede transformarse en “un saludo a la bandera”.
La medida se adoptó luego de que decenas de migrantes intentaran ingresar a Perú durante la semana pasada, lo que derivó en bloqueos en la Panamericana Sur y en el propio paso fronterizo, generando extensas filas de camiones y buses. Muchos de los migrantes aseguraron a medios peruanos que desean regresar a sus países de origen ante el endurecimiento de las políticas migratorias en Chile.
El mandatario peruano adelantó además que solicitará al Congreso prioridad para una reforma constitucional que permita a las Fuerzas Armadas asumir directamente el resguardo fronterizo.
Según reportes locales, un pequeño grupo de migrantes continúa en la zona limítrofe con sus pertenencias y mascotas, manteniendo su petición —de forma pacífica— de ser autorizados a ingresar al Perú.
