Quebrada Chañarcito dañó fuentes productivas de Inca de Oro y Diego de Almagro

Tanto el sector de La Vega como La Finca se vieron afectados por la bajada del alud, por lo que Aguas Chañar ya planifica planes de contingencia para contener la situación.

Debido a la bajada de la quebrada de Chañarcito, las fuentes productivas de agua potable La Finca y La Vega, quedaron totalmente  sin capacidad de operar. Por lo que Inca de Oro quedó sin su única fuente y Diego de Almagro perdió el 30% de su producción.

Ante lo ocurrido personal de Aguas Chañar visitó la zona, comprobando la situación y planificando las obras para normalizar el servicio, trabajos que no durarían menos de 70 días. Por lo que la empresa sanitaria dispondrá de un plan de suministro alternativo para Inca de Oro, mientras que Diego de Almagro tendría menor presión durante este periodo.

“Recorrimos tanto La Finca como La Vega, y la quebrada arrasó con todo el terreno, por lo que la captación desapareció y parte de la aducción también se destruyó. Eso nos hace tomar medidas de inmediato, por eso en Inca de Oro se están enviando camiones aljibes para que la población mantenga suministro normal. Mientras que Diego de Almagro tendrá una disminución en la presión para que no tengamos sectores afectados y todos puedan acceder al agua en sus casas”, dijo Sofía Ávalos, subgerente de Comunicaciones y Asuntos Corporativos.

Acerca de las obras a realizar, se debe revisar la línea completa para comenzar con levantamientos topográficos, trabajo de ingeniería y poder realizar las obras en el menor tiempo posible. Esto se encuentra influenciado porque no ocurran más lluvias en la cordillera que afecten la zona nuevamente.

“Una vez enterados de lo ocurrido el trabajo de la compañía comenzó y se estableció un tren de camiones aljibes para Inca de oro. Ahora viene lo más complejo que es analizar las alternativas técnicas y reponer los daños, esto debe durar poco más de dos meses, por lo que en ese tiempo realizaremos todos los esfuerzos para que nuestros clientes no sientan lo ocurrido en su servicio de agua potable”, destacó Ávalos.

Cabe destacar que estas son las únicas fuentes productivas que sufrieron daños por las últimas lluvias en la cordillera, manteniéndose el resto en normal funcionamiento.