INTERNACIONAL

Arabia Saudita: el misterioso robo de un preciado diamante azul que provocó una cadena de asesinatos y una crisis diplomática

El robo de joyas preciosas de un palacio saudí en 1989 provocó una cadena de asesinatos y una crisis diplomática que continúa hasta nuestros días. Ahora, en una entrevista, el hombre detrás del robo cuenta su historia.

 

El príncipe saudita y su esposa estuvieron de vacaciones durante tres meses. El ladrón sabía que ese era el momento perfecto para dar el golpe.

Kriangkrai Techamong corría un riesgo importante.

El robo podía ser castigado con amputación en Arabia Saudita, pero Kriangkrai no era un ladrón común y corriente: tenía en la mira docenas de joyas y piedras preciosas que eran de propiedad de su jefe, el Príncipe Faisal, hijo mayor del rey Fahd de Arabia Saudita.

Como empleado y limpiador, Kriangkrai había llegado a conocer cada rincón del palacio del Príncipe Faisal. Y se había enterado de que tres de las cuatro cajas fuertes que contenían las joyas del príncipe se dejaban desbloqueadas regularmente.

Era una oportunidad demasiado buena como para perderla. Tenía deudas importantes por haber jugado y apostado en el lugar donde vivían los trabajadores del palacio y ésta era una ocasión de oro para huir del país represivo donde ya no soportaba vivir.

Una noche, inventó una excusa para estar dentro del palacio después del anochecer.

Esperó a que el resto del personal se fuera y entró a escondidas en la habitación del príncipe. Cogió algunas joyas y se las pegó a su cuerpo con cinta adhesiva. También almacenó otras dentro de equipos de limpieza e incluso en bolsas de aspiradora.

Al final, logró tomar casi 30 kg de joyas y piedras preciosas, valoradas en cerca de US$20 millones. Más tarde, los funcionarios sauditas dirían que entre los artículos robados había relojes de oro y varios rubíes.

Esa noche, Kriangkrai escondió los objetos de valor por todo el palacio, en lugares que sabía que no serían descubiertos.

Luego, más de un mes después, los escondió en medio de una gran entrega de carga que envió a su casa en Tailandia.

 

BBC MUNDO

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba