Fiscalía acreditó por segunda vez que homicidio en Tierra Amarilla fue mediante asfixia por inmersión
Fiscal Christian González Carriel indagó la causa y presentó por segunda vez los antecedentes ante el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, luego que el primer juicio por este caso, en que también se había obtenido condena, fuera anulado tras la presentación de recurso respectivo ante la Corte de Apelaciones.
La Fiscalía de Atacama, por segunda vez, logró acreditar un delito de homicidio cometido en la comuna de Tierra Amarilla, hecho delictual donde los protagonistas fueron dos personas en situación de calle que residían en la ribera del río
El primer juicio por este caso se realizó en abril de este año, instancia en que se condenó a Francisco Erazo Pizarro como autor consumado del crimen. Oportunidad en que su defensa presentó un recurso de nulidad ante la Corte de Apelaciones de Copiapó, el cual fue acogido por lo que se determinó la repetición de la audiencia de Juicio Oral.
En esta segunda oportunidad el fiscal jefe de Copiapó, Christian González Carriel, quien estuvo a cargo de las diligencias investigativas, argumentó que los hechos ocurrieron en julio del año 2017 en el mencionado sector, donde el condenado sostuvo una discusión con la víctima, Manuel Villalón, estando ambos en estado de ebriedad.
A partir de las indagatorias fue posible acreditar que el agresor propinó golpes de puños a la víctima, además de golpear su rostro con una piedra. Acción que motivó que el afectado cayera a la ribera del río que pasa por el lugar.
“A partir de estos hechos la Fiscalía de Atacama logró reunir prueba científica para poder reconstituir lo ocurrido, particularmente con los peritajes del Servicio Médico Legal que establecieron que la causa de muerte fue asfixia por inmersión. Lo que vino a sustentar las versiones reunidas por la PDI en cuanto a que el condenado mantuvo la cabeza sumergida de la víctima”, dijo el fiscal.
En este segundo juicio la Fiscalía logró una condena unánime en contra de Francisco Erazo Rojas como autor del delito de homicidio, aplicándose una pena de cinco años y un día de cárcel.
