PDI detectó que 1.545 negocios formales venden artículos robados
Según cifras de la Policía de Investigaciones, la mayoría de los locales identificados son de chatarrería (611), seguidos de joyerías (413) y venta de metales (108).
La Policía de Investigaciones detectó que 1.545 negocios formales a lo largo y ancho del país que comercializan artículos robados.
Según las cifras de la Coordinadora Nacional de Mercado Delictual de Bienes Robados (MedBro), el mercado de los productos robados es variado y, al 3 de septiembre de este año, iban desde autos a frutos secos, paneles solares, celulares e incluso cobre, publica hoy La Tercera.
Los negocios formales que lideran en el análisis son las chatarrerías (611), joyerías (413), venta de metales (108), telefonía celular (94) y desarmadurías (82).
Le siguen locales de artículos computacionales (51), de accesorios de vehículos (37), de antigüedades (33), de metalúrgica (26), de artículos varios (23), de artículos musicales (20), de electrodomésticos (19), de videojuegos (14), de herramientas usadas (4), de plásticos (3), de bienes muebles (3), de rubros varios (2) y de fotografía (2).
Cristián Cerda, coordinador de Medoro, explicó que estos comercios «siguen todo el canal respectivo, inician actividades, se establecen como formales y están a la vista del público. Pero buscan productos robados para tener una buena vitrina que les dé ganancias«.
La identificación de estos negocios se logró por la acción de la Sección de Inspección de Actas de Procedencia (Sinapro) de la PDI, a la cual comerciantes están obligados a informar sobre sus compras, y luego la policía civil coteja en terreno que la información coincida con los productos en exposición.
Cerda enfatiza que no se puede apuntar solo al comercio establecido, dada la amplia presencia del comercio informal cuyo número hoy es desconocido, sumado a la predominancia de Internet, donde se dificulta la fiscalización: «Estamos haciendo un trabajo con el SII para fiscalizar este sector, pero hoy la web facilitad la venta, porque no necesariamente se tiene que decir quién vende».
