Partido Republicano acalla a sus consejeros: Por la boca muere el pez
El Partido Republicano ha impuesto un silencio a sus consejeros constitucionales, prohibiéndoles hablar con la prensa sin la autorización de la colectividad.
Esta medida se ha tomado como una señal de responsabilidad y para evitar nuevas polémicas derivadas de las declaraciones de sus representantes.
La decisión fue tomada durante un encuentro del partido en Valparaíso, donde acordaron que todas las decisiones comunicacionales de los consejeros estarán bajo la responsabilidad del partido, incluyendo apariciones públicas, entrevistas y declaraciones.
La medida busca evitar situaciones como la polémica entrevista de Luis Silva, el consejero electo con mayor número de votos, quien generó controversia al expresar su reticencia a buscar acuerdos con la minoría derrotada en el proceso constituyente.
El partido ha tenido que aclarar las posturas de sus líderes y tomar distancia de los comentarios controvertidos de algunos de sus miembros. El objetivo del silencio impuesto es evitar flancos comunicacionales y posibles errores antes de iniciar el trabajo de redacción de la propuesta constitucional. Se ha conformado un comité de instalación para organizar el trabajo de los consejeros y se espera que en las próximas semanas comiencen a realizar intervenciones públicas.
