En medio de las negociaciones para sacar adelante la llamada ley ómnibus de Javier Milei, el Gobierno Argentino decidió sacar a la petrolera estatal YPF de la lista de empresas susceptibles de privatización.
Luego de las conversaciones en la Cámara de Diputados, también se estableció que en el caso de Nucleoeléctrica Argentina, Banco Nación y ARSAT, el Estado seguirá manteniendo el control de las compañías, pudiendo privatizar solo una parte de estas.
Con todo se mantienen “privatizables” otras empresas como Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino, Operadora Ferroviaria, Aysa, Enarsa y medios de comunicación como la agencia Télam.
Miley saca a YPF de su lista de empresas a privatizar
La ley titulada “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”, presentada a fines de diciembre, contenía entre sus cientos de artículos diversas compañías las cuales podrían privatizarse con el fin de “concentrar la actividad del Estado en sus funciones esenciales”.
A la su vez, Milei busca “generar mayor competencia y eficiencia económica, reducir la carga fiscal, mejorar la calidad de los servicios, promover la inversión privada y profesionalizar la gestión de las empresas”.
Justamente YPF, la cual fue expropiada a la española Repsol durante el mandato de Cristina Kirchner en 2012, quedando el estado con el 51% de las acciones.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), hasta octubre de 2023 trabajaban hasta octubre 134 mil personas en las empresas del Estado. Operadora Ferroviaria S.E, YPF S.A., Banco de la Nación Argentina, Correo Oficial de la República Argentina S.A, Aerolíneas Argentinas S.A. y Aysa ocupan casi el 77%.
Durante 2023 se ejecutaron transferencias y aportes a empresas públicas por cerca de $2.300.000 millones, equivalente a 1,22% del PIB, informó la OPC.
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