Gobierno no negociará con Celestino Córdova por huelga de hambre
Para Hernán Larraín, «no es un procedimiento razonable que se negocie poniendo una huelga de por medio, porque es una presión indebida para cualquier autoridad».
El Gobierno dejó en claro que no negociará con machi Celestino Córdova, único condenado en el caso Luchsinger Mackay, quien cumple 80 días en huelga de hambre, hasta que deponga la medida de fuerza.
Córdova inició la huelga luego que se negara la posibilidad de dejar la cárcel por dos días para realizar una ceremonia en su rehue, apelando a su condición de machi.
Por su parte, organizaciones de derechos humanos pidieron al ministro Andrés Chadwick que accediera al requerimiento del machi, lo cual fue descartado de plano por el gobernador de Cautín, Mauricio Ojeda.
“El gobierno de Sebastián Piñera no va a negociar con nadie que ejerza una medida que presión que atente contra su vida. Hay una resolución de la Corte de Apelaciones que faculta al personal médico a alimentar (a Córdova) cuando esté en riesgo su vida”, declaró a radio Biobío.
Sus palabras fueron compartidas por el ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien sostuvo que la huelga de hambre de Córdova es “una presión indebida para cualquier autoridad”.
“Nosotros no tenemos ninguna petición formal de Celestino Córdova, hay otros terceros que han hecho peticiones por él y lo que nosotros hemos dicho es que tenemos la mejor disposición, en la medida que deponga la huelga”, expresó.
Para Larraín, “no es un procedimiento razonable que se negocie poniendo una huelga de por medio, porque es una presión indebida para cualquier autoridad”.
El titular de Justicia argumentó que dar pie a una conversación con Córdova se terminará el principio de autoridad y sentará un precedente para que otros privados de libertad imiten la medida de fuerza.
Dinamo.
