Dan a conocer resultados de encuesta sobre la Percepción a un año de los aluviones

Estudio de Santo Tomas Copiapó, señala que un 73,89% de los encuestados manifestó estar en desacuerdo o muy en desacuerdo en que la ayuda del Gobierno  fuera oportuna y rápida.

 

Descargar Estudio:Resultados encuesta Percepción a un año de la catastrofe

 

La catástrofe vivida en Atacama el 25 de marzo de 2015, producto de los aluviones que azotaron en muchas ciudades y localidades Atacama, sin lugar a dudas se sitúa dentro de las más importantes de la historia reciente de nuestro país. Esta impactó de manera material a las viviendas y la infraestructura pública y privada, pero de manera más importante, afectó duramente la vida de todos quienes vivimos en Atacama.

Habiendo transcurrido ya un año se hace importante conocer la visión que la ciudadanía posee sobre lo ocurrido,  especialmente respecto al apoyo recibido y del nivel de superación de los efectos negativos de la catástrofe. Dado este contexto, la Escuela de Psicología de la Universidad Santo Tomás y el Observatorio de Opinión Pública de dicha casa de estudios, realizó un estudio destinado a conocer la percepción de los habitantes de Copiapó respecto al apoyo recibido durante la catástrofe y sobre la ciudad y la superación de los efectos negativos de la catástrofe del 25 de marzo de 2015.

Se encuestó a 340 personas, un 61,61% mujeres y un 38,39% hombres, de diversas edades, actividades e ingresos económicos.  De ellos, un 12,12% indicó haber sido afectado gravemente por la catástrofe, un 30,91 habría sido afectado medianamente, un 33,64% de manera leve y un 23,33% no fue afectado por la catástrofe.

Los principales resultados de este estudio son los que a continuación se detallan:

PERCEPCIÓN DE APOYO EN LA CATASTROFE

La literatura ha documentado que en catástrofes de diverso tipo aumentan el capital social en el plano comunitario. En Copiapó no sucedió algo distinto frente a las duras consecuencias de los aluviones que afectaron a Atacama a finales de marzo de 2015. A un año del evento climático un 79,29% de las personas encuestadas en el presente estudio afirmaron que estaban de acuerdo o muy de acuerdo con que el apoyo entre los vecinos fue esencial para superar los efectos de catástrofe.

Un 45,26% de los consultados indico que sintió una buena comprensión de los empleadores con las necesidades de los trabajadores afectados. Por su parte, un 33,14% estuvo en desacuerdo con que la conducta de los empleadores habría sido de comprensión.

Destaca de manera muy especial la buena percepción que quedó en la ciudadanía respecto a la actuación de empresas privadas, especialmente mineras, durante la catástrofe. Un 64,77% de los encuestados señalo que creía que la ayuda de las de empresas mineras y otras empresas privadas fue adecuada.

A diferencia de lo anterior, un 73,89% de los encuestados se manifestó en desacuerdo o muy en desacuerdo con que la ayuda de las instituciones de gobierno fuera oportuna y rápida. Este desacuerdo con el papel del gobierno se incrementa con el grado de afectación en la catástrofe.

Pese a lo anterior, un 43,03% de los encuestados señaló que consideraba que los bonos del gobierno destinados a construcción y enseres son buenos beneficios. Esto contrasta con el 37,98% de quienes están en desacuerdo con que estos beneficios fueran buenos.

 PERCEPCIONES RESPECTO A LA CIUDAD Y LA SUPERACIÓN DE LOS EFECTOS NEGATIVOS DE LA CATÁSTROFE

Pese a los difíciles momentos vividos con la catástrofe una población importante miraba con optimismo el futuro del Copiapó. Un mes después del evento climático un 39,4% de creía que Copiapó volvería a ser igual o mejor que antes. Sin embargo, un año después, un 69,64% de las personas encuestadas en el presente estudio están en desacuerdo o muy en desacuerdo con que Copiapó haya vuelto a ser igual que antes, y solo un 14,88% cree lo contrario.

En lo que si hay un alto acuerdo, es en el aprendizaje que ha significado esta difícil situación. Un 62,01% de los encuestados piensa que esta experiencia nos ha ayudado a prepararnos para otras catástrofes.

A un año de la catástrofe, un 50,3% de los encuestados siente que a esas alturas aún no se ha logrado normalizar la vida cotidiana en la ciudad. Junto a ello, un 60,24% de los encuestados señala  estar en desacuerdo o muy en desacuerdo con que ya superamos completamente la emergencia en ámbito de la salud. A su vez, un 58,29% señala estar en desacuerdo o mu en desacuerdo con que la ciudad haya logrado recuperar la infraestructura pública dañada por los aluviones.

Para finalizar es preciso comentar que, a un año plazo, existen percepciones de la ciudadanía que se han mantenido y otras que se han hecho más crítica. Se destaca que aún se recuerda el apoyo de los vecinos como un factor positivo para superar los efectos negativos de la catástrofe. Algo similar sucede con la ayuda de las empresas privadas, especialmente mineras. Se ha mantenido también la visión crítica respecto al apoyo del gobierno. Sin embargo, lo que más llama la atención es la percepción de la ciudadanía respecto a que Copiapó aún no ha vuelto a ser igual que antes, de que la vida cotidiana en la ciudad aún no estaría normalizada,  de que la emergencia en el ámbito de la salud aún no se ha superado, y que tampoco se ha logrado recuperar la infraestructura pública dañada  por los aluviones.

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