Jugador de fútbol mató al árbitro que lo acababa de expulsar.

En Tulancingo, México, El caso recuerda a muchas otras agresiones que, en grado distinto, sufren los colegiados al cumplir su labor.

El pasado domingo (06.11.2016), un partido de la liga del estado mexicano de Hidalgo terminó de manera trágica cuando un jugador, aparentemente airado por haber sido expulsado del encuentro, dio un cabezazo al árbitro del partido. Como consecuencia de la agresión, el juez central sufrió un traumatismo craneoencefálico que acabó con su vida. El atacante logró huir, aunque ya fue denunciado por jugadores que participaban en el partido.

A primera vista, el caso es de una gravedad excepcional. Pero analizado en general, y en sus distintas dimensiones, las agresiones contra los árbitros están presentes prácticamente en cada partido. Tan solo en España, el Sindicato de Árbitros calcula que hay unas 50 agresiones al mes, según declaró uno de sus representantes al diario El País. Con todo, las agresiones físicas no son frecuentes, afirmó a ese medio uno representante de dicho sindicato español. «El comportamiento no-deportivo que presenta una incidencia más alta en los partidos de fútbol es la agresión verbal de padres (espectadores) al árbitro”, concluyó a su vez un estudio científico sobre la agresividad y la violencia en el fútbol (ver el documento completo abajo).

«La agresividad en el deporte es un aspecto complejo, en el que influyen demasiadas variables; por ejemplo, racismo, xenofobia, frustración, intereses deportivos, intereses económicos, enfrentamiento generacional, ausencia de desarrollo moral, hacinamiento, alcohol, edad juvenil de los espectadores y deportistas, identificación con los colores del equipo, etcétera”, considera el especialista en psicología del deporte, Jacinto Luis González-Oya.

En un estudio titulado «Aproximación a la violencia en el fútbol y en el arbitraje”, González-Oya asegura que los principales factores que propician las agresiones verbales son: «la protección que ofrece el grupo, el anonimato”, así como «la seguridad de que diga lo que diga no será castigado e incluso será reforzado por espectadores próximos”.

Ninguno de los estudios consultados por DW aborda agresiones tan extremas como la ocurrida en México. Por desgracia, no es un caso aislado. En seguida presentamos una lista de algunas agresiones a árbitros ocurridas recientemente en varios puntos del mundo.

 

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