Un nuevo vuelo de deportación procedente de Estados Unidos arribó la madrugada de este viernes al Aeropuerto de Santiago, con 14 ciudadanos chilenos a bordo, según informó el Ministerio del Interior. Los retornados fueron expulsados por incumplir la normativa legal del país norteamericano, en el marco de una estricta política migratoria impulsada por la administración de Donald Trump.
Este operativo se suma a otros dos vuelos similares que llegaron al país los días 22 de mayo y 5 de junio. En esta ocasión, tras el aterrizaje, los pasajeros fueron sometidos al control migratorio habitual, verificándose la identidad de cada uno. Entre ellos, uno fue puesto a disposición de la Justicia chilena, debido a que mantenía una orden de detención pendiente.
El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, precisó que «de todos los vuelos realizados hasta la fecha, se ha deportado a 102 personas: de ellas, más del 80% son hombres, poco más del 50% cometió una infracción legal en Estados Unidos, y los restantes incumplieron la normativa migratoria».
Además, detalló que seis de los deportados han sido entregados a la Justicia chilena tras su regreso, ya sea por órdenes de detención vigentes o por haber incumplido medidas cautelares como el arraigo.
Elizalde valoró la coordinación entre las autoridades estadounidenses y el Gobierno de Chile, en la que han participado diversas instituciones, entre ellas los ministerios del Interior, Relaciones Exteriores y Seguridad Pública, además de la Policía de Investigaciones y el Registro Civil.
«Seguiremos realizando las coordinaciones necesarias con el gobierno de Estados Unidos en lo que a Chile corresponde para el retorno seguro de nuestros connacionales», concluyó el secretario de Estado.
