Al menos dos bomberos murieron este domingo durante un tiroteo registrado en medio de un incendio forestal en la montaña Canfield, en la localidad de Coeur d’Alene, estado de Idaho, al norte de Estados Unidos. El hecho, que involucró armas de alto poder, motivó el despliegue urgente del Buró Federal de Investigaciones (FBI), ante la posibilidad de una emboscada.
El tiroteo comenzó cerca de las 14:00 horas, hora local (18:00 en Chile), cuando equipos de emergencia respondían a un llamado por un incendio forestal en la zona, ubicada cerca de la frontera con el estado de Washington.
Según informó el alguacil del condado de Kootenai, Robert Norris, la situación continúa siendo crítica. «Se reportó que bomberos estaban recibiendo disparos. Tenemos ahora dos muertos. Tenemos un número desconocido de heridos. También tenemos civiles que están bajando de la montaña, también posiblemente civiles que estén atrapados o en shock. Esta es una situación muy fresca», señaló.
Aunque el número de atacantes y sus identidades aún no ha sido determinado, los informes preliminares indican que usaron rifles de alto poder. La prensa local sugiere que podría tratarse de una emboscada, aunque las autoridades no han confirmado esta hipótesis.
El subdirector del FBI, Dan Bongino, confirmó a través de sus redes sociales que agentes del buró están en camino a la escena para brindar apoyo táctico y operativo.
Por su parte, el gobernador de Idaho, Brad Little, lamentó lo ocurrido y expresó su solidaridad con las víctimas. «Varios heroicos bomberos sufrieron un ataque cuando respondían a un incendio en el norte del estado, cerca de la frontera con Canadá. Este es un atroz ataque directo a nuestros valientes bomberos. Le pido a todos los habitantes de Idaho que recen por ellos y sus familias mientras esperamos saber más», publicó en la red social X.
