El Gobierno de Estados Unidos decidió suspender parcialmente los envíos de armamento a Ucrania, medida que afecta sistemas clave como misiles de defensa aérea y proyectiles de precisión, en el marco de una revisión de su gasto militar y del apoyo entregado a países extranjeros.
Según reportó la cadena CNN, la decisión fue autorizada por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y busca reordenar las prioridades estratégicas del país. En esa línea, la subsecretaria de prensa de la Casa Blanca, Anna Kelly, afirmó que la medida responde a la necesidad de «priorizar los intereses de Estados Unidos».
Funcionarios del Pentágono informaron que entre el material afectado por esta suspensión se encuentran interceptores para los sistemas de defensa aérea Patriot, municiones de artillería de precisión y misiles compatibles con los aviones F-16, suministrados por Washington a las fuerzas ucranianas.
La prensa estadounidense ha advertido sobre la preocupación interna respecto al bajo nivel de reservas de armamento estratégico, como misiles, bombas y piezas de artillería, lo que habría motivado el replanteamiento de la asistencia exterior.
Estados Unidos fue el principal proveedor de ayuda militar a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022. Sin embargo, tras la llegada de Donald Trump a la presidencia en enero de este año, el enfoque ha cambiado notablemente.
De acuerdo con el más reciente informe del Instituto Kiel, Europa ha superado a Estados Unidos en la entrega total de ayuda militar a Ucrania. Mientras los países europeos han aportado 72.000 millones de euros, los estadounidenses han entregado 65.000 millones.
