
El Ejército israelí confirmó este martes que ya cuenta con tropas desplegadas dentro de la ciudad de Gaza, considerada el “principal bastión” de Hamás, donde calcula que se encuentran entre 2.000 y 3.000 milicianos de la organización islamista.
En una sesión informativa con medios internacionales, un oficial militar explicó que, tras semanas de operaciones en las afueras, las fuerzas comenzaron la noche del lunes a profundizar sus acciones en el centro urbano. “Anoche empezamos a profundizar nuestras operaciones dentro de la ciudad, es algo gradual, pero ayer fue un gran paso adelante en el despliegue de fuerzas y en las operaciones en el terreno”, señaló el oficial, que pidió mantener el anonimato.
El avance fue descrito como la transición hacia la “fase principal” del plan aprobado en agosto por el Gobierno de Benjamín Netanyahu para invadir la capital gazatí, entonces habitada por alrededor de un millón de personas. Según la misma fuente, las operaciones previas en los alrededores permitieron eliminar “objetivos claves” y destruir edificios en los que, asegura, operaba Hamás, alcanzando ya el control del 40% de la periferia de la ciudad.
El oficial advirtió que bajo la urbe existe “una vasta red de túneles e infraestructura terrorista” que aún no ha sido desmantelada. Actualmente, dos divisiones participan en las acciones y en los próximos días se espera el refuerzo de más unidades.
El Ejército estima que unas 350.000 personas, equivalentes al 40% de la población, han abandonado Gaza capital desde que se aprobó la invasión, y acusa a Hamás de intentar obstaculizar la evacuación, aunque no entregó pruebas al respecto.
Sobre la posibilidad de sumar más efectivos, el oficial indicó que ya se han convocado decenas de miles de reservistas en las últimas semanas, muchos de los cuales fueron destinados a otras zonas, como Cisjordania y el norte de Israel.
