Agosto negro: A los 83 años muere el genial Gene Wilder
El actor y comediante estadounidense popular por interpretar al Willy Wonka original y al patas negras de «La Chica de Rojo» falleció en su domicilio a los 83 años víctima del mal de Alzheimer.
Aunque sus reconocibles ojos saltones de color azul eran garantía de expresión y risa fácil para la cultura popular, recluido en su casa de Stamford, Connecticut desde que se le diagnosticó el mal de Alzheimer, Gene Wilder ya había olvidado hace tiempo su legado de comedia en el cine.
Wilder falleció a los 83 años de edad, luego de una extensa carrera en teatro, cine y TV. Será recordado por su participación en películas a estas alturas clásicas como la versión original de «Willy Wonka y la fábrica de chocolate» de 1971 (donde Johhny Depp trató de capturar la esencia demencial y ausente del chocolatero), «Los productores», «El joven Frankestein», «Todo lo que usted siempre quiso saber sobre sexo pero nunca se atrevió a preguntar», «La chica de rojo» y «Ciegos sordos y locos», entre otras.
El actor se casó 4 veces y fue pareja incombustible de las comedias de Mel Brooks y de Richard Pryor en 4 películas. Entre sus marcas de identidad está su melodiosa voz, capaz de mantenerse dulce hasta en momentos de total histeria y su permanente peinado rizado y rubio. Esa apariencia inocente lo mantuvo en roles del hombre acusado de diversos crímenes, de villanos involuntarios o paladines enfrentados a violentas circunstancias, ya fuese contra la mafia, en el viejo oeste u objeto de deseo de voluptuosas mujeres.
Antes de eso trató de forjar una carrera como actor de carácter y de dramas, pero su fisonomía siempre decantaba en los castings de comedia. Aun así, logró ser nominado dos veces al Oscar por su papel en «Los productores» y por «El joven Frankestein», ambas películas de Mel Brooks.
Su rol de Willy Wonka lo mantiene hasta ahora dentro de los 100 mejores películas de todos los tiempos. Una película apreciada por él, en particular por su pelea con el director por mantener cojo al personaje pese a la decisión de los productores. Más tarde, también haría eco por su crítica recepción de la versión de Tim Burton (2005) de la celebrada historia escrita por Roald Dahl y que pretendió, desde su génesis, ser un relato entretenido pero incómodo para padres e hijos.
«Creo que la nueva versión es un insulto», dijo en su momento. «Me agrada Johhny Depp, pero cuando supe que iba a hacer el remake me dije «es un error». Luego empecé a ver los avances y vi lo que estaban haciendo. Pensé, «No veré esa película— me cae bien Depp». Desde entonces solo he recibido comentarios del tipo «Tu versión es mejor», pero sé que sólo están hablando acerca de Willy Wonka», dijo.
Si bien se le diagnosticó Alzheimer el año 2005, alcanzó a publicar sus memorias ese mismo año bajo el título de «Kiss me like a stranger: my search for love and art» y una novela dos años después titulada «My french whore».
La noticia de su deceso fue dada a conocer por su sobrino Jordan Walker-Pearlman, a quien Wilder siempre se refirió como un verdadero hijo.
Fuente: Lanacion.cl
