El Gobierno dio a conocer el proyecto base del futuro Complejo Penitenciario “El Arenal”, la nueva cárcel que se ubicará a 40 kilómetros de Copiapó y que busca responder a la necesidad de aumentar la capacidad del sistema carcelario nacional, mejorar la seguridad y fortalecer las condiciones de trabajo de Gendarmería. La iniciativa, presentada el pasado 9 de diciembre, considera una inversión de 300 millones de dólares.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo, destacó que el anuncio constituye un avance esperado por la región, calificando el proyecto como “largamente anhelado por Atacama”. El recinto se emplazará en un terreno fiscal al norponiente de Copiapó y tendrá más de 76 mil metros cuadrados construidos.
La cárcel contará con capacidad para 2.160 internos y dispondrá de 15 módulos de reclusión. Entre sus servicios se incluyen alimentación, salud y apoyo a la reinserción social. El diseño contempla además una unidad de salud penal, escuela para reclusos, talleres industriales, áreas deportivas, una central de producción de alimentos y sistemas sustentables como generación fotovoltaica y tratamiento de aguas.
El complejo será operado por 600 gendarmes, quienes dispondrán de espacios adecuados para el ejercicio de sus funciones. La construcción del recinto fue adjudicada a la empresa Constructora San José, la misma que actualmente opera un penal en Talca. El Gobierno afirmó tener plena confianza en su desempeño.
Las obras están proyectadas para comenzar en 2028 y concluir en 2031. La concesión tendrá una duración de 20 años. Durante la fase de construcción, se estima la creación de alrededor de 500 empleos promedio mensuales, lo que aportará dinamismo a la economía local.
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