
La Sala de Cámara de Copiapó volvió a convertirse en el epicentro cultural de la región con una nueva edición del Festival Internacional de Cine, las Artes y el Miedo de Atacama (FICTA 2025), el único evento de cine de género de la macrozona norte del país. La iniciativa, organizada por Pecafilms, reunió durante dos días —viernes 24 y sábado 25 de octubre— a artistas, estudiantes y público general en torno al arte, la creatividad y las diversas expresiones del miedo.
El festival contempló actividades gratuitas y multidisciplinarias, entre ellas la participación especial del Coro de Cámara de Copiapó, la academia de danza Arte de Roka, y presentaciones de las Escuelas San Pedro, el Centro Educativo Chamonate y el Liceo Jorge Alessandri Rodríguez de Tierra Amarilla. Además, se proyectaron micro metrajes y cortometrajes realizados por estudiantes, aficionados y profesionales, junto a producciones provenientes de festivales latinoamericanos y europeos aliados.
Formación y participación escolar
La directora de Pecafilms y de FICTA, Claudia Latorre Zepeda, agradeció la respuesta del público y destacó la integración de la comunidad educativa.
“Queremos agradecer al público que asiste a FICTA y que permite que este festival tenga continuidad. Hemos ido integrando la participación de colegios y estudiantes de distintas edades”, señaló.
Recordó que, desde sus inicios, el certamen cuenta con un bloque infantil, desarrollado junto a la Universidad de Atacama, donde se exhiben cortometrajes hechos por y para niños. “El propósito es la formación de audiencias. En alguna versión se invitó incluso a JUNJI, logrando un valioso intercambio con profesionales de la educación”, añadió.
En esta edición, el festival amplió su alcance al incorporar presentaciones teatrales y audiovisuales creadas por establecimientos educacionales, fomentando el aprendizaje y la creatividad en distintos niveles.
Experiencias del público
El público valoró la diversidad artística y la oportunidad de participar en una instancia cultural única. Katherine Caniguante, quien asistió por tercera vez, expresó: “Encuentro que el festival es una buena instancia cultural para mostrar otras cosas. Fueron súper interesantes los cortometrajes, y que participaran niños de colegios me parece excelente”.
En tanto, Carla Rodríguez destacó la potencia del cortometraje “El miedo hasta dentro”, mientras que Pablo Gallardo resaltó la profundidad del tema central del evento: “El miedo es algo tan primitivo, propio de nuestra identidad humana, que se convierte en una instancia para crear en distintas expresiones de arte. Me gustó mucho el trabajo de los chicos de la escuela El Chañar, el del ascensor”.
Por su parte, Francisco Quiroz, quien asistió con su familia, valoró la organización y la diversidad de propuestas. “Lo que más me gustó fue la participación de danza y la integración de los colegios”, afirmó. Su hijo, de nueve años, agregó que disfrutó especialmente de la obra de Frankenstein.
Arte y colaboración regional
Durante el festival también se presentó una exposición de artes visuales, con obras creadas especialmente para la ocasión por artistas locales. FICTA, autogestionado y organizado por Pecafilms, contó con el apoyo de la Librería Qué Leo Copiapó, el Centro Cultural Municipal de Atacama y el financiamiento del Gobierno Regional de Atacama para los trabajos teatrales presentados.
