Google anunció que reformulará desde cero su proyecto de construcción de un centro de datos en Santiago, tras las preocupaciones sobre su impacto ambiental. El plan original, que implicaba una inversión de 200 millones de dólares, fue revisado luego de que una corte ambiental decidiera en febrero revertir parcialmente el permiso otorgado en 2020, exigiendo la incorporación de los efectos del cambio climático en la evaluación.
La empresa comunicó que no continuará con el proceso de solicitud de permisos para el proyecto en la comuna de Cerrillos, tal como fue aprobado inicialmente, y que comenzará un nuevo proceso para un centro de datos que utilizará tecnología de enfriamiento con aire en el mismo lugar.
El Segundo Tribunal Ambiental había solicitado regresar a una etapa previa del proceso de evaluación, respondiendo a una reclamación presentada por ciudadanos y una municipalidad local, quienes expresaron su preocupación por el impacto del proyecto en un acuífero de la capital.
