La pana (o panne) no está ajena a nadie, pero si no quieres que te pase en una carretera, y menos en tus vacaciones, debes revisar y poner atención a ciertos factores y señales en tu auto, que disminuirán el riesgo de desperfectos y aumentarán la seguridad para llegar feliz a tu destino antes de viajar.
Si bien, es recomendable que antes de salir sea un mecánico el que examine el vehículo, cada conductor debe tener presentes factores como el estado de los neumáticos, los frenos, niveles, e incluso la batería.
Cabe recordar que además de las cosas en las que fijarse antes de viajar en tu automóvil, hay que tener los papeles, seguros, permisos y trámites en general al día, ya que la autoridad puede quitarte el vehículo en caso de no cumplir con alguno.
1. Neumáticos: presión correcta y no gastados
Los neumáticos son la única parte de tu automóvil que está en contacto directo con la carretera, por lo que su estado es esencial para tu seguridad.
Procura revisar la presión de cada neumático antes de iniciar el viaje, asegurándote de que estén inflados según las especificaciones del fabricante, que la puedes encontrar en el manual de usuario o en el marco de la puerta del piloto. Es importante un inflado correcto, ya que eso disminuye la posibilidad de afectar el manejo y aumentar el riesgo de que se reviente una de las llantas.
Además, es relevante verificar que los neumáticos no estén gastados, otro factor de peligro al momento de viajar. Asegúrate que ver y sentir los diseños sobre la goma, que no esté desgastado o lizo, ya que esto puede afectar la tracción, especialmente en condiciones de lluvia.
2. Hay que revisar el sistema de frenos del auto antes de viajar
Los frenos son cruciales para tu seguridad en la carretera, teniendo en consideración la velocidad de muchas de las vías que sobrepasan los 100 km/h. Para salir seguros, primero, realiza una inspección visual de los discos y las pastillas de freno para asegurarte de que no estén desgastados.
Escucha y pon atención a cualquier ruido inusual al frenar, ya que esto podría ser indicativo de problemas. Además, verifica el nivel y la calidad del líquido de frenos, los que bordean los $10 mil en el mercado chileno.
Si notas alguna anomalía, es imperativo que un profesional lo revise antes de salir de viaje.
3. Fluidos del motor: desde el aceite al refrigerante
El motor de tu automóvil es su corazón, y para funcionar lo más sano posible depende de varios fluidos como el famoso aceite. Verifica el nivel de este con la varilla y asegúrate de que esté limpio, no con un tono negro, sino más parecido al café.
De igual modo, pon atención a la luz que anuncia la falta de aceite de motor y considera el kilometraje o tiempo transcurrido desde la última vez que se le hizo la respectiva mantención. Para saber qué aceite es el correcto para tu auto, verifica el manual de usuario o pregúntale a tu mecánico, ya que el incorrecto podría dañarse seriamente.
También, revisa el líquido refrigerante para evitar problemas de sobrecalentamiento. Si bien este compuesto se cambia cada 40 mil km, es necesario chequearlo cada 10 mil o 20 mil kilómetros.
Igualmente, controla el nivel de líquido de dirección asistida y líquido de frenos, ya que estos contribuyen al rendimiento general del vehículo.
4. Sistema de luces y focos: que todas funcionen
Las luces son esenciales para la visibilidad y seguridad durante los viajes en la carretera. Asegúrate de que todas las luces exteriores funcionen correctamente, incluyendo faros, luces traseras, intermitentes y luces de freno.
También, verifica que los focos y ampolletas estén correctamente alineadas para evitar deslumbramientos a otros conductores y garantizar una visibilidad óptima durante la noche.
Recuerda que no tener las luces del auto en funcionando en su totalidad es causal de una multa por parte de Carabineros, según las leyes del tránsito.
5. Batería del vehículo bien cargada: evita sorpresas desagradables
Una batería descargada puede arruinar tus planes de vacaciones. Verifica la edad de la batería y reemplázala si es necesario. Limpia los terminales y asegúrate de que estén bien sujetos.
Si tu automóvil ha estado inactivo por un tiempo, cargar la batería antes de salir puede ser una medida preventiva inteligente. Prende el motor y dale una vuelta al auto para verificar que no haya posible señales de fallas.
6. Revisar suspensión y dirección: viajar controlado en tu auto
La suspensión y dirección afectan directamente la estabilidad y maniobrabilidad de tu automóvil, produce desgaste desigual de las superficies de los neumáticos y pérdida de adherencia. Realiza una inspección visual de los amortiguadores y asegúrate de que no haya fugas de líquido.
Prueba la dirección para asegurarte de que responde suavemente, sin desviaciones y sin ruidos extraños. Cualquier problema en estos sistemas puede afectar negativamente tu capacidad para controlar el vehículo.
7. Aire acondicionado y calefacción: comodidad y seguridad
Aunque no afecta directamente la seguridad, tener un sistema de climatización en buen estado hará que tu viaje sea más cómodo, lo que ayudará a que manejes más concentrado por la carretera.
Verifica que el aire acondicionado y la calefacción funcionen correctamente, mantener o cambiar el filtro y asegúrate de que los niveles de refrigerante sean adecuados.
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