El empate 2-2 entre Universidad de Chile y Lanús en el duelo de ida por las semifinales de la Copa Sudamericana terminó envuelto en polémica, luego de las declaraciones del capitán del elenco argentino, Carlos Izquierdoz, quien acusó al árbitro brasileño Anderson Daronco de haberlos amenazado con cobrar un penal a favor del cuadro chileno.
El defensor trasandino expresó su molestia por el cobro de la mano en el área visitante que permitió a Charles Aránguiz marcar el empate definitivo para los azules sobre la hora. Según su versión, el juez habría anticipado la sanción en reiteradas ocasiones durante el segundo tiempo.
“Me parece lamentable. Desde que arrancó el segundo tiempo, el árbitro me venía diciendo ‘le voy a cobrar penal al 30, le voy a cobrar penal al 30’. En todas las jugadas me decía lo mismo. Terminó haciendo lo que había prometido”, afirmó Izquierdoz al término del encuentro.
El número 30 de Lanús, Agustín Cardozo, fue precisamente quien cometió la infracción sancionada como mano dentro del área, generando la indignación del plantel y cuerpo técnico del conjunto argentino. “Me lo dijo tres o cuatro veces, pregúntenle a él si no me decía eso. ‘Le voy a cobrar penal al 30’, así me decía. Tres o cuatro veces me lo dijo”, insistió el zaguero.
El empate dejó abierta la serie entre Universidad de Chile y Lanús, que se definirá el próximo jueves 30 de octubre en territorio argentino, en busca del paso a la final de la Copa Sudamericana.
