
De antemano estaba claro en los pronósticos que la selección chilena sub 20 tenía un duelo complejo ante Japón, pero ni apelando a la localía La Roja pudo neutralizar a los nipones, que se llevaron su segunda victoria en el Mundial.
El elenco nacional no fue capaz de hacer pie contra un disciplinado elenco asiático, al cual no pudo superar ni en el manejo del balón ni en la velocidad de las bandas, ante 42.517 espectadores en el Nacional.
Muy por el contrario, Japón fue avanzando de manera inteligente, con Ian Garguez despejando un peligroso balón desde la línea tras el remate cruzado de Kosugi a los 18 minutos.
Recién a los 23 minutos, Chile pudo llegar a la portería de los nipones con un remate de Agustín Arce.
A los 35 minutos, eso sí, Japón, pudo abrir la cuenta mediante lanzamiento penal, pero Sebastián Mella estuvo notable para atajar el disparo de Takaoka.
La Roja sufrió la baja de Emiliano Ramos al cierre del primer lapso, tras lo cual el conjunto japonés mantuvo el ritmo y ante otra desinteligencia local, volvieron a disponer de un penal al minuto 54 (con la venia del árbitro del partido, que juzgó como falta un choque leve), donde Ichihara pudo anotar el 1-0.
Chile sintió el golpe tras la desventaja, pero pudo evitar que Japón pudiera profundizar más allá, aun pese a un buen ingreso de Rodrigo Godoy. Poco a poco, apuntando a un arquero visitante algo débil en sus acciones, Juan Francisco Rossel tuvo el empate con un cabezazo a los 70 minutos ante la mala salida del portero.
Sin embargo, con otra mala gestión defensiva, tras dos cabezazos de la zaga que nunca despejaron, Yokoyama quedó libre y remató ajustadamente a los 82 minutos para sellar el triunfo japonés.
Juan Francisco Rossel pudo descontar a los 84 minutos al quedar mano a mano con el portero japonés, pero no supo resolver a tiempo.
Con el 2-0, Japón aseguró su paso a los octavos de final, mientras que La Roja queda obligada a ganarle a Egipto con tal de seguir en carrera.