Varias escuelas en los estados del norte de la India, incluida la capital, Nueva Delhi, se han visto obligadas a cerrar sus puertas anticipadamente debido a una severa ola de calor que azota la región. Las temperaturas han superado los 47 grados Celsius, poniendo en riesgo la salud de estudiantes y docentes.
El cierre de las escuelas se produce semanas antes de las vacaciones escolares programadas, reflejando la gravedad de la situación climática. Las autoridades han tomado esta medida para proteger a los niños del intenso calor, que puede causar graves problemas de salud como golpes de calor, deshidratación y agotamiento.
Esta ola de calor coincide con las elecciones generales de la India, que comenzaron el 19 de abril y concluirán el 1 de junio. Las elevadas temperaturas podrían tener un impacto significativo en la participación de los votantes en los comicios más multitudinarios del mundo, donde millones de ciudadanos están llamados a las urnas.
A pesar de estos esfuerzos, la situación sigue siendo crítica. Los servicios de meteorología han emitido alertas y recomiendan a la población mantenerse hidratada y evitar la exposición prolongada al sol. Las autoridades sanitarias también han intensificado las campañas de concienciación sobre los riesgos asociados al calor extremo.
