Varsovia, 10 de septiembre de 2025. Polonia consideró como un “acto de agresión” la violación de su espacio aéreo durante la madrugada por parte de drones rusos, en el marco de un ataque masivo contra Ucrania que se extendió a territorio polaco. El operativo de defensa, que se prolongó durante toda la noche, recibió el respaldo unánime de los aliados de la OTAN.
Según autoridades ucranianas, Rusia lanzó más de 40 misiles balísticos y de crucero, además de 415 drones, de los cuales al menos ocho drones kamikaze Shahed fueron dirigidos de manera deliberada contra territorio polaco.
El primer ministro Donald Tusk calificó la acción como una “probable provocación a gran escala” y advirtió que “la situación es grave. Hoy nadie puede dudar de que debemos prepararnos para diversos escenarios”.
Uno de los aparatos cayó sobre el tejado de un edificio residencial en Wyryki, en el este del país, causando daños materiales leves. Restos de otro dron fueron hallados en la región de Lublin, sin que se registraran víctimas. Las autoridades recomendaron a la población no acercarse ni manipular fragmentos de drones derribados hasta la llegada de equipos especializados.
La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, afirmó que existen “indicaciones que sugieren” que el ataque ruso fue intencional.
Durante la operación, que obligó al cierre temporal del espacio aéreo y de cuatro aeropuertos, las defensas polacas contaron con el apoyo del Mando Aéreo Aliado de la OTAN y de la Koninklijke Luchtmacht de Países Bajos. Tras la neutralización de los drones, el Mando Operativo de las Fuerzas Armadas informó que las operaciones concluyeron alrededor de las 06.00 GMT.
