
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, endureció su postura frente a Irán y exigió públicamente su “rendición incondicional” ante la creciente tensión bélica derivada del reciente bombardeo israelí sobre Teherán. A través de su red social Truth Social, el mandatario también lanzó una advertencia directa al líder supremo iraní, Alí Jameneí.
“Sabemos exactamente dónde se esconde el llamado ‘Líder Supremo’. Es un blanco fácil, pero allí está a salvo. No vamos a eliminarlo (¡matarlo!), al menos no por ahora”, escribió Trump, en una declaración que agudiza el tono del gobierno estadounidense frente al régimen iraní.
A renglón seguido, subrayó que la paciencia de su administración se encuentra en un punto crítico: “No queremos que se disparen misiles contra civiles ni soldados estadounidenses. Nuestra paciencia se está agotando. ¡Gracias por su atención a este asunto!”
Posteriormente, el mandatario publicó un nuevo mensaje con la exigencia explícita de “¡RENDIMIENTO INCONDICIONAL!” a las autoridades de Teherán.
En otra de sus publicaciones, Trump aseguró que Estados Unidos mantiene actualmente el “control total sobre los cielos de Irán”, y destacó la superioridad del equipamiento militar norteamericano: “Irán contaba con buenos rastreadores aéreos y otros equipos defensivos, y en abundancia, pero no se comparan con los fabricados, concebidos y fabricados en EEUU. Nadie lo hace mejor que Estados Unidos”.
Estas declaraciones llegan apenas un día después de que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, no descartara públicamente la posibilidad de asesinar al líder supremo iraní con tal de alcanzar los tres objetivos centrales de su gobierno en el actual conflicto.
“Haremos lo necesario para lograr estos objetivos y nos estamos coordinando bien con Estados Unidos”, señaló Netanyahu, quien se abstuvo de revelar detalles de las operaciones militares en curso. “Vamos a hacer lo que sea necesario. Vamos hacia la victoria”, afirmó.
En esa misma línea, el jefe de gobierno israelí calificó al régimen de Jameneí como “un cáncer”, y advirtió que constituye “la mayor amenaza para el mundo entero”, reiterando su histórica oposición al programa nuclear iraní.
La tensión entre Estados Unidos, Israel e Irán se encuentra en un punto de alta sensibilidad, con amenazas cruzadas y declaraciones que escalan el conflicto en una región ya marcada por la inestabilidad.