Estados Unidos ha movilizado al menos 30 aviones militares hacia Europa durante los últimos tres días, según datos de seguimiento revisados por BBC Verify. Este inusual despliegue ocurre en el contexto de la creciente tensión en Medio Oriente y la posibilidad de una intervención militar directa contra Irán.
Entre las aeronaves trasladadas se encuentran aviones cisterna KC-135, fundamentales para el reabastecimiento aéreo de cazas y bombarderos en operaciones prolongadas. De acuerdo con el sitio Flightradar24, al menos siete de estos aviones hicieron escala en bases de España, Escocia e Inglaterra antes de dirigirse hacia el este de Sicilia. Uno de ellos aterrizó en Creta, Grecia, mientras que los otros seis no tenían destino declarado.
El expresidente Donald Trump, en su red social Truth Social, endureció el tono hacia Irán, advirtiendo que la paciencia estadounidense “se está agotando” y exigiendo su “¡RENDICIÓN INCONDICIONAL!”. Estas declaraciones se suman al escenario de alta tensión tras los recientes enfrentamientos entre Israel e Irán.
Justin Bronk, analista del Royal United Services Institute, calificó el movimiento de aviones cisterna como “sumamente inusual” y señaló que indica la activación de planes de contingencia por parte de Washington, posiblemente para apoyar operaciones de combate intensivas en la región en las próximas semanas.
A este despliegue aéreo se suma el traslado del portaaviones USS Nimitz desde el mar de China Meridional hacia Medio Oriente. Según Reuters, una actividad prevista en Vietnam fue cancelada por una “necesidad operativa emergente”, y el buque fue ubicado en el estrecho de Malaca rumbo a Singapur. El Nimitz, escoltado por destructores con misiles guiados, transporta aviones de combate, lo que refuerza la presencia naval de EE.UU. en el área.
Asimismo, tres funcionarios del Departamento de Defensa confirmaron a Reuters que aviones de combate F-16, F-22 y F-35 han sido desplegados en bases de Medio Oriente, con los aviones cisterna reubicados en Europa cumpliendo una función de apoyo logístico para esas operaciones.
El exjefe de las Fuerzas de Defensa Irlandesas, vicealmirante Mark Mellett, sugirió que estos movimientos responden a una política de “ambigüedad estratégica”, cuyo objetivo sería presionar a Irán para que ceda en las negociaciones sobre su programa nuclear.
Por su parte, el vicepresidente J.D. Vance no descartó una acción directa: “Trump podría decidir que necesita tomar más medidas”, comentó en alusión a una eventual intervención estadounidense en respaldo a Israel.
