
El papa León XIV hizo un firme llamado este lunes para que se permita de forma “urgente” la entrada de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza, en el marco de una conversación telefónica sostenida con el presidente palestino, Mahmud Abas. En el diálogo, el pontífice reiteró la necesidad de proteger a la población civil y los lugares sagrados, ante el agravamiento de la crisis en Medio Oriente.
“Dada la dramática situación humanitaria, se subrayó la urgencia de proporcionar socorro a los más expuestos a las consecuencias del conflicto y permitir la adecuada entrada de ayuda humanitaria”, informó el Vaticano.
León XIV renovó también su llamamiento al respeto pleno del Derecho Internacional Humanitario, recalcando “la prohibición del uso indiscriminado de la fuerza, del desplazamiento forzoso de la población y la obligación de proteger a los civiles y los lugares santos”.
Durante la conversación, ambos líderes abordaron los recientes hechos vinculados al conflicto en Gaza y la creciente violencia en Cisjordania.
El día anterior, durante el rezo del Ángelus, el papa condenó con fuerza la violencia en la región, especialmente tras el ataque israelí del pasado jueves a la parroquia de la Sagrada Familia —la única católica de Gaza— que dejó tres fallecidos y varios heridos.
“No puede haber justificación alguna para el castigo colectivo, el uso indiscriminado de la fuerza o el desplazamiento forzoso de los habitantes”, expresó entonces desde Castel Gandolfo, ante cientos de fieles.
Asimismo, se recordó que León XIV ya había recibido el pasado viernes una llamada del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en la que pidió un cese al fuego inmediato y el resguardo de los lugares de culto y de los creyentes.
En su conversación con Abas, el pontífice evocó además el décimo aniversario del Acuerdo Global entre la Santa Sede y el Estado de Palestina, firmado en 2015 y vigente desde enero de 2016.