
El precio del petróleo sufrió una brusca caída este lunes tras los ataques con misiles lanzados por Irán contra bases militares estadounidenses en Qatar e Irak. A pesar de la gravedad del anuncio, el mercado reaccionó con una fuerte ola de ventas, impulsada por la percepción de que Teherán no tendría la voluntad ni la capacidad de escalar el conflicto con represalias sostenidas contra Estados Unidos.
A las 13:23 horas, el barril de crudo estadounidense (WTI) registraba una baja del 4,1%, cotizándose en 70,78 dólares. Este retroceso contrasta marcadamente con el alza del 6% registrada la noche del domingo, cuando el precio llegó a tocar los 78,50 dólares por barril ante las primeras noticias del ataque.
Según medios estatales iraníes y funcionarios con conocimiento directo de los hechos, Irán lanzó misiles contra la base aérea de Al Udeid en Qatar, así como contra instalaciones estadounidenses en Irak. No obstante, los proyectiles habrían sido interceptados, lo que redujo la percepción de riesgo inmediato entre los operadores.
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica calificó la acción como un “poderoso y destructivo ataque con misiles” en respuesta a recientes bombardeos estadounidenses sobre instalaciones nucleares en territorio iraní. En un comunicado, reiteraron que “la República Islámica de Irán, confiando en Dios Todopoderoso y en su fiel y orgulloso pueblo, nunca dejará sin respuesta ninguna agresión contra su integridad territorial, soberanía o seguridad nacional”.
Pese al tono desafiante de Teherán, la reacción del mercado refleja dudas sobre la posibilidad de una escalada mayor en el conflicto, lo que ha impulsado una corrección en los precios del crudo tras el repunte inicial.