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Nexans: La fórmula que le dio un nuevo aire al negocio del grupo Luksic en Francia

Nexans, la productora de cables europea donde el holding chileno tiene un 28,92% de la propiedad, pasó de perder más de la mitad de su valor en bolsa durante 2018, a subir 78,75% en 2019. el nuevo gerente general, Christopher Guérin, revela los ejes del despegue.

 

(La Tercera / Pulso) 2018 fue negro para una de las grandes inversiones del grupo Luksic en Europa. Nexans, la productora de cables francesa, exfilial de Alcatel, en la que el holding chileno posee el 28,92% de sus acciones a través de la sociedad basada en el Reino Unido, Invexans Limited, se desplomó 52,4% en la bolsa parisina. Si en 2017 su valorización bursátil alcanzó los US$ 2.672 millones, en diciembre de 2018 rondó los US$ 1.215 millones, es decir, en un año elos Luksic vieron caer su inversión en US$ 421,4 millones, sin contar los dividendos que podría haber recibido.

Nexans es una de las fabricantes de cables más grandes del mundo, con presencia en 34 países, casi 27 mil empleados y está listada en la Bolsa de París. Un acuerdo firmado en septiembre de 2008 permitió a la firma de los Luksic Invexans (entonces Madeco), convertirse en el principal accionista individual de Nexans, tras la venta de la unidad de cables regional de Invexans a dicha empresa francesa, a cambio de efectivo y una participación del 9% en la compañía, porcentaje que con los años ha ido aumentando hasta casi el 30% actual.

A junio de 2019, Nexans aportaba prácticamente la totalidad de los ingresos del área manufacturera de Quiñenco, que significa el 25% de los ingresos del holding, que también controla a otras empresas, como el Banco de Chile o CCU.

Ante el mal panorama bursátil de 2018, que no fue otra cosa que un reflejo de los menores resultados reportados y la mala perspectiva para los venideros, Nexans nombró a fines de ese año a un nuevo CEO con la misión de levantar a la compañía. Christopher Guérin (47) fue el elegido. Recién asumido, el ejecutivo indicó en su momento a Pulso Domingo que “los resultados de 2018 fueron decepcionantes, porque la industria ha enfrentado vientos en contra, en particular en el segmento de cables de alto voltaje. La mayoría de los participantes de la industria han emitido advertencias de menores ganancias y sus acciones han caído”. La gigante mundial de los cables también cambió por ese entonces a su gerente de finanzas o CFO, además del responsable de negocios del segmento de alto voltaje.

Adicionalmente a los problemas en el área de cables de alto voltaje, en el mercado señalaron que en 2018 las firmas de este rubro “sintieron el menor nivel de actividad y también la mayor competencia de empresas equivalentes chinas, que han ganado participación de mercado”. A lo anterior, se sumó la presión competitiva desde que el grupo de cable italiano Prysmian compró a su rival estadounidense General Cable, poniendo un abismo de escala con la francesa.

A un año de ese cortocircuito al interior de Nexans, hoy el panorama es distinto.

El valor de las acciones despegó 78,75% en 2019 y completó una capitalización bursátil equivalente a US$ 2.129,5 millones, por lo que los Luksic recuperó US$ 264,5 millones en patrimonio bursátil frente a los US$ 421,4 millones de disminución observados en 2018.

El hombre clave en el repunte y sus palancas de cambio

El nuevo líder de Nexans, quien ya cumplió un año con la misión de levantar a la firma, asegura ahora a Pulso Domingo que “el plan del ‘Nuevo Nexans’ está en camino”. Menciona que sus tres principales focos con miras a 2021 han estado puestos en “reducir los costos, la generación de flujo de caja y en el rendimiento del capital invertido (Roce)”. Para este 2020 se espera que el plan de disminución de costos esté completado en un 60% o 70%, que el Ebitda sea mayor a 400 millones de euros, que el Roce antes de impuestos se ubique entre 11% y 15% y que las ventas ronden los 4.600 millones de euros.

Debido a la reestructuración, en la firma gala prevén que la utilidad neta pasará de un estatus casi neutro (14 millones de euros en 2018) a pérdidas en torno a 100 millones de euros en 2019, para recuperarse en 2021 con una cifra azul esperada de más de 170 millones de euros.

Guérin se ha preocupado de mantener constante comunicación del nuevo plan de la compañía directamente con los accionistas, además de evangelizarlo con los inversionistas institucionales en reuniones privadas. “Los primeros resultados del nuevo método de dirección y la serie de contratos ganados ciertamente contribuyeron a una mejor percepción del grupo”, reflexiona una alta fuente de la compañía, quien agrega que “estamos mejor posicionados para ofrecer a nuestros clientes algo más que cables y avanzar en la cadena de valor. De hecho, todas las actividades ahora se centran en desarrollar servicios y soluciones para capturar nuevos mercados y agregar más valor que solamente volumen”.

El CEO francés asegura que está “confiado en que alcanzaremos en 2021 los objetivos que nos trazamos a fines de 2018”. Ilustra que los recientes contratos de órdenes de proyectos de alto voltaje que lograron con las empresas Orsted y Eversource demuestran su capacidad de innovar en la transición eléctrica.

“Este contrato exclusivo para suministrar hasta mil kilómetros cables de exportación para los proyectos de energía eólica marina en EEUU de Orsted y el contrato SSE Seagreen recientemente otorgado, proporcionan visibilidad de ingresos a Nexans hasta 2027, y se han estimado entre 800 millones y 1.200 millones de euros, dependiendo de las opciones técnicas para cada parque eólico marino (de los cuales unos 400 millones de euros ya han sido asegurados)”, detalla Guérin, quien además destaca que con estos planes, la planta de productos que tienen en América del Norte se beneficiará con un alto nivel de utilización. El francés confidencia también que la cartera de pedidos de cables para 2021 ya está “totalmente llena”.

Si bien los resultados de Nexans de 2019 aún no se conocen, fuentes ligadas a la empresa aseguran que el Ebitda de la firma se ubicará entre los 360 millones y 390 millones de euros.

A poco más de un año de su asunción como CEO y a la luz de los cambios acometidos, el ejecutivo francés está cumpliendo al pie de la letra su plan de transformación del modelo operativo que, como lo dijo en 2018, está basado en tres pilares: enfocar, simplificar y adaptar. “En lugar de centrarnos en el crecimiento del volumen, queremos avanzar en la cadena de valor abordando los servicios de mercado de 120.000 millones de euros con nuevas ofertas y asociaciones estratégicas”, sostuvo entonces Guérin.

Con lo anterior, el ejecutivo ha buscado desarrollar soluciones que dejen atrás la idea de que los cables solo son productos básicos y que puedan seguir apuntalando desarrollos altamente tecnológicos, como las conexiones de electricidad o de fibra óptica submarina.

Siempre hay un chileno

La cirugía en la estructura gerencial que se tuvo que aplicar en Nexans para mostrar estos cambios un año después del desplome, fue mayor. Se creó un comité ejecutivo compuesto por 12 miembros que reemplazó a los órganos de gobierno anteriores, el directorio de administración y el consejo de administración de 22 miembros.

Nueve gerentes de la primera línea son nuevos en sus cargos: Ragnhild Katteland, vicepresidenta ejecutiva de Subsea & Land Systems Business Group; Julien Hueber, vicepresidente ejecutivo a cargo del Grupo de Negocios de Soluciones y Proyectos de la Industria, quien también lidera la región Asia-Pacífico; Vijay Mahadevan, vicepresidente ejecutivo de Medio Oriente, Rusia, África y Sudamérica; Steven Vermeulen, vicepresidente ejecutivo a cargo del Grupo de Negocios de Telecomunicaciones y Datos, quien también supervisa el área de América del Norte; Nino Cusimano, vicepresidente corporativo senior, asesor general y secretario general; Jérôme Fournier, vicepresidente corporativo de Innovación, Servicios y Crecimiento; Jean-Christophe Juilliard, vicepresidente corporativo senior y director financiero a cargo de los Sistemas de Información y Finanzas; David Dragone, vicepresidente corporativo senior de Recursos Humanos; y, finalmente, siempre hay un chileno.

Se trata de Juan Ignacio Eyzaguirre Matte (37), vicepresidente corporativo de Estrategia, Fusiones y Adquisiciones. El ingeniero civil PUC y MBA y máster en políticas públicas de Harvard es un hombre de confianza de Andrónico Luksic, ya que desde 2015 trabaja en Quiñenco. Eyzaguirre fue jefe de gabinete del Presidente Piñera en 2010 y 2011, además de ser director del Sistema de Empresas Públicas (SEP), todo cuando tenía menos de 30 años. Anteriormente fue ejecutivo del área de finanzas corporativas en LarrainVial.

Una fuente conocedora de Nexans revela el rol del holding chileno como agente de cambio dentro de la empresa gala. “Los directores que representan a Quiñenco están muy comprometidos en su papel y están muy interesados en el desarrollo del grupo. Están desafiando las opciones estratégicas propuestas por la gerencia en el mejor interés de la compañía”. El peso de los Luksic en el directorio de la firma de cables es relevante, dado que de los 13 miembros de la mesa -donde destacan siete mujeres- cuatro son hombres ligados a Quiñenco: el mismo Andrónico, Francisco Pérez (gerente general del holding), Óscar Hasbún (gerente general de la Compañía Sudamericana de Vapores) y el independiente cercano a Luksic, Hubert Porte (fundador y presidente ejecutivo de la administradora general de fondos Ecus).

En Nexans están ilusionados. Reconocen que su enfoque estratégico hacia adelante será el mercado de las soluciones para la transición energética -cambio desde el paradigma de proyectos energéticos de matriz fósil hacia los renovables-, campo donde ya están involucrados en proyectos de energías limpias, como parques eólicos marinos en todo el mundo.

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