Proyecto busca traer agua desde los ríos del sur para Atacama y el norte del país
El director de «AquaAtacama», Félix Bogliolo detalló aspectos de esta llamada carretera hídrica.
El director del proyecto «AquaAtacama«, el francés Félix Bogliolo, conversó en radio Maray, entregando detalles de la iniciativa que busca combatir la escasez hídrica en la zona norte del país, en especial en la región de Atacama, aquello a través de la construcción de una tubería submarina que pueda llevar el agua desde los ríos Maule, Rapel o Biobío.
Félix Bogliolo, explicó que la iniciativa busca transportar hasta 35 metros cúbicos por segundo desde las desembocaduras de los ríos del sur de Chile, hasta las regiones del extremo norte del país, usando dos tuberías submarinas, estas llegarían desde Valparaíso hasta Arica, indicó.
«Este proyecto creo le haría muy bien al país de llevar agua al norte y transformarlo en un vergel, ya que tomamos las aguas de los ríos del Sur, concretamente para la región y estamos hablando de 35 metros cúbicos por segundo, el equivalente a 2 o 3 desaladoras «, dijo Bogliolo.
«Lo importante es que tomamos agua en el límite de salinidad, que está unos cuantos kilómetros río adentro de la desembocadura, donde el agua ya no puede servir para ningún uso humano, ni bebida ni riego, es decir que no molestamos a nadie. Los únicos usuarios río abajo que hay que tener mucho cuidado con ellos es la fauna y la flora de la desembocadura, lo que se determina con estudios», añadió
Bogliolo además indicó que el objetivo de este proyecto es dar mejor calidad de agua a las ciudades del norte y también para las empresas de la zona, pensando claramente en la agricultura de toda la zona norte, uno de los mayores consumidores del agua, y donde se podría regar unas 25 mil hectáreas suplementarias nuevas que hoy son solamente sitios eriazos en la Provincia de Copiapó»
«Darle más agua y de mayor calidad a todas las ciudades del norte, permitir que todas las industrias, la agricultura, los campos, tenga agua para desarrollarse y no tener proyectos estancados por el agua. Desarrollar la agricultura, parando así la llamada desertificación», concluyó.
