Moáis de Rapa Nui enfrentan grave deterioro y riesgo de conservación, advierte Unesco
La Unesco ha emitido una preocupante evaluación sobre el estado de conservación de los moáis en Rapa Nui, calificándolo como «regular-malo» y alertando sobre la gravedad de la situación. Esta evaluación se da tras el devastador incendio que ocurrió en octubre de 2022 en la cantera del volcán Rano Raraku, ubicado en el Parque Nacional Rapa Nui, sitio declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1995.
De acuerdo con el informe de diagnóstico de conservación de la Unesco, el incendio afectó a un total de 358 elementos, entre ellos 222 moáis. Aunque la mayoría de los recursos sufrieron una afectación superficial, con cambios de coloración y presencia de hollín, no se observaron fisuras ni fracturas significativas. No obstante, se han detectado otras alteraciones previas al incendio, ocasionadas por factores climáticos e hídricos que dañan progresivamente los bienes arqueológicos.
La coordinadora responsable de Cultura de Unesco Chile, Pilar Vicuña, advirtió que los moáis enfrentan un riesgo permanente debido a las condiciones naturales del lugar donde se encuentran ubicados. Los agentes climáticos e hídricos son los principales responsables del deterioro de estos tesoros arqueológicos, y se requiere un trabajo urgente para protegerlos.
La Unesco ha propuesto acciones correctoras a corto plazo, enfocándose especialmente en 22 moáis que se encuentran en estado grave. Estas acciones incluyen el tratamiento de control del biodeterioro, la consolidación, adhesión e hidrofugación, así como medidas para prevenir y mitigar incendios forestales en la zona, considerando el plan de la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
La comunidad indígena Ma’u Henua, encargada de administrar el parque, ha alzado la voz sobre la necesidad de recursos para conservar los moáis. Según sus estimaciones, se requieren al menos 100 millones de pesos para el cuidado de solo tres moáis, lo que ha motivado gestiones y financiamiento tanto a nivel nacional como internacional.
Ante el llamado de alerta de la Unesco y las solicitudes de la comunidad local, es imperativo que se tomen acciones inmediatas para preservar estos valiosos tesoros culturales y garantizar su legado para las futuras generaciones. La conservación de los moáis de Rapa Nui debe ser una prioridad global para salvaguardar la historia y el patrimonio de la humanidad.
